domingo, 14 de marzo de 2010



Las mentira  de Xstrata a los campesinos de Espinar

Los suelos de Alto Huarca esconden millones toneladas de cobre bajo tierra. Comunidad ubicado a 3800 metros de altitud, perteneciente a la provincia Espinar. Sus 300 comuneros se dedican a la crianza y pastoreo de ganado. De pronto se encontraron con camionetas lujosas y buses en sus campos, donde solían pastar sus animales. ¿Qué había ocurrido, para la concurrencia de personas extrañas al lugar?

El galanteo para congraciarse con los dueños de la riqueza, era simple y no costaba esfuerzo alguno: poner en servicio sus flotas de buses. Una vez llegado los funcionarios de la minera Xstrata y representantes del Ministerio de Energía y Minas, traían en mano la noticia: el desarrollo había llegado con ellos para los comuneros.

Los campesinos se preguntaban en la reunión como podría ser ese progreso. ¿Dejaban el pastoreo, para escarbar sus lomas lleno de cobre? La mentira estaba por comenzar en la boca de los estudiantes de San marcos, hoy los profesionales fantoches de la transnacional Xstrata Tintaya.


La emboscada

Para persuadir en el propósito de embaucarlos en el mentado desarrollo, habían que dar permiso a la consultora Golder (había hecho el EIA), para abrirles el camino. Frenar posibles voces que se oponían. Defendía la explotación. Sus conclusiones: i) la minera no generaría contaminación al medio ambiente; ii) los estudios realizados era de garantía plena; iii) Antapacay estaba apto para iniciar sus explotaciones en el 2012. El conferenciante insistía en que este proyecto traía el desarrollo, y que era la oportunidad para los personas de esa jurisdicción rural dedicado a la actividad pecuaria.

Lo que escondía la consultora, era que "el daño es de por si irreversible". La presa del relave en Huinipampa a parte de drenar, contamina los ojos de agua, que bebe los animales, claro está las subterráneas que se ramifican al interior del suelo. Lo peor es que vuelve infértil la tierra. “En una oportunidad mi sector de Cocareta, ha sido contaminado con el relave. Vinieron los trabajadores y me dijeron que no denunciaría, a cambio recibiría alimentos de primera necesidad. También dono sillas de plásticos a la comunidad… “. Un joven de 23 años delataba con detalles de Bajo Huancané. No hace falta un especialista, es el sentido común del campesino.

La orden que emana de un grupo de jóvenes comuneros se puede interpretar así: terminado su explotación Xstrata Tintaya en el 2012, se tiene que llevar la presa de relave, al país donde pertenecen los dueños. Nos explicaba con una convicción el dirigente del Comité de Jóvenes.

La miseria

En la Audiencia los directivos lanzan cifras numéricas para obnubilar la mente de los asistentes. i) 1500 millones de soles se invertirá en la etapa de construcción; ii) el proyecto generará 3659 empleos directos; y iii) la comunidad se beneficiara con el 20 por ciento. Es decir, 100 empleos. Este último discurso tenía por objetivo, atrapar la confianza de los campesinos modestos y muchos analfabetos o con una instrucción mínima.

Las mentiras en la Audiencia, son de lesa comunidad. Pero anotamos algunas: i) Los inversionistas en la práctica no desembolsaron el dinero suyo. Pidieron el aval del Estado. Esto quiere decir, quienes financiaron fueron los peruanos; ii) Es sabido quien genera más empleo es el agro, que las mineras; iii) los trabajos no están reservados para los comuneros comunes; solo para los que colaboran, para mitigar voces contrarias; iv) las capacitaciones son un engaño. La emisión de certificados no tiene un valor académico de un instituto.

El caso de la Comunidad de Bajo Huancané conoce y viven sus habitantes en una pobreza. Solo basta observar al llegar a ese poblado, por una carretera de trocha sin mantenimiento alguno. 30 años atrás, antes que empezara a explotar Tintaya, el campesino podía llevar una vida sin apuros económicos. “Tenía muchas cabezas de ganado y entre ellos la alpaca. Vendía la lana, y compraba alimentos para todo el año. Cuando empezó la explotación se terminó mis paccoñas. Moría uno a uno ante mis ojos… “. ¿Qué había pasado? Era la aparición de enfermedades nuevas. Imposible combatir con medicamentos. Nos relata el comunero de 40 años. “La mina para nosotros trajo miseria. Solo se benefician los presidentes. Estos son los que reciben su platita mensualmente”.


El Desafío

Las inversiones extranjeras gozan con el blindaje jurídico, dado por el régimen corrupto de Alberto Fujimori. Se empezó todo un plan en el Congreso para cambiar las leyes referido a la minería. Ley del agua, ley de tierra, ley laboral. Esto explica que las leyes están a favor de los que vienen de afuera. Son ellos los que se sienten con derecho de propiedad, ante la protección de la Constitución Política. ¿Qué hacer frente a ello? Queda resistir y luchar, para que estas leyes que ponen en condición de esclavo al peruano, un día pueda morir.

El desafío, es enorme para el movimiento campesino. Se encuentra adormecida, por falta de líderes. No queda otro que emprender la re-organización. Atacar al sistema neoliberal que, bien se podría conceptuar como colonialista. Que defienden la derecha rancia de Lima; como el soldado O-llanta.