domingo, 19 de septiembre de 2010




El nefasto anuncio para los campesinos

Los campesinos en sus tres años de lucha constante por la propiedad de la tierra, pasaron diversas pruebas de resistencia. Muchos desencuentros desfavorables fueron superados fácilmente; porque existe la “unidad” férrea al interior de la organización. Así, los camisas verdes demostraron ser imbatibles y continúan en la dirección política con bravura. Por otro lado, se ha consolidado como un movimiento social fuerte y contrario a las políticas del Gobierno nacional de García en el Sur del país; y tiene "la posibilidad" de ser Gobierno Regional.

El adelanto de Alan García y la aprobación explícita de Guillen Benavides llevaron a consumar la licitación del Proyecto Majes II. Entregó en su integridad al Consorcio Angostura Siguas, para que se haga dueño del Proyecto más importante en los últimos años. Esta medida ha golpeado al Sur del país; porque siempre por historia ha sido contrario a las políticas colonialistas. Supo defender sus empresas emblemas con estoicidad como paso en el año 2002 en el Gobierno de Toledo. Había antecedentes firmes de lo que era capaz los arequipeños, por eso es que García Pérez, busco con urgencia una alianza a con un títere (de los chilenos) como Guillén Benavides para llevar este proceso de “regalar” todo lo que tenga que ver al megaproyecto. Esta entrega atenta al orgullo e identidad fuerte de los pobladores del Sur.


El meneo de la prensa

Cuando se supo del nefasto anuncio de la entrega de una de las riquezas de la nación; un sector de la prensa meneaba satisfecho por la desgracia que caía sobre los campesinos cooperativistas; sin embargo esto era en sí el avance cruel del modelo colonialista al Sur. Específicamente a Arequipa considerado como el león del Sur, por saber defender y liderar ante una injusticia y del entreguismo del Gobierno nacional. Primero fue, la concesión del Aeropuerto Rodríguez Ballón; luego la entrega de Majes II. Este último hecho de felonía, quisieron hacer ver a la población como “un triunfo”. Según la lógica de los hombres del micrófono, con esta firma se asomaba el desarrollo para la Región del Sur. Así, un informante Fredy Rosas, decoraba la hazaña de su jefe, con imprimir la parte patriótica del arequipeño con el himno de Arequipa, tras enterarse de la buena pro al Consorcio transnacional. Es verdad que ha luchado, desde ese espacio radial y televisivo no para los intereses de la nación; sino el hombre siempre ponía su pellejo y aceptaba que le pusieran la camisa a la fuerza sus patrones del exterior. Es uno de los hombres del periodismo más reaccionario que Arequipa conoció en estos años de lucha contra un modelo económico.

Por una parte, la derecha rancia arequipeña (de raíces extranjeras) festejaba en su local de la Cámara de Comercio de Arequipa; el “obsequio” a la transnacional española de su jefe del Palacio de Pizarro. Por una parte, una prensa progresista estaba ocupada de las minucias y de los dineros de la publicidad (que de eso viven y apoyan desde sus respectivos programas) de los candidatos a la Región. Esto es, ser cómplice y formar parte de los que “negocian” con las riquezas de la nación. En otras palabras, ponen de rodillas la soberanía de la patria. Esta es la herencia de un periodismo antinacionalista, contrario a las luchas de los campesinos cooperativistas modestos. El pecado capital está en que el movimiento social abraza una ideología nacionalista y buscan un cambio real para el país; sólo no llevan bajo su brazo las banderas rojas comunistas. Peor aún no le dan importancia a los "intelectuales progres" que analizan desde una óptica clasista los hechos sociales.

La mañana del lunes 13, “se apropiaron” de manera veloz con la entrega de la buena pro el Consorcio Angostura Siguas de nuestra riqueza destinado para él quien es parte de este territorio. A pesar, que había problemas legales que resolver en un juzgado mixto del distrito de Wanchaq del Cusco, que buscaba "paralizar el proceso de licitación". Con el traspaso de la administración (para los neoliberales) al dominio extranjero de Majes II, se pierde y se regala una propiedad perteneciente a los peruanos por 20 años. Culminada la firma en los pasillos del poder, si que hubo un botín colosal que repartirse entre el entorno del Apra.


La movilización campesina

Una prensa reaccionaria desafiaba “la marcha” de los campesinos. Al punto tal, que ironizaban con sus interrogantes: ¿Cuántos se movilizaban, y quiénes eran sus dirigentes? Estaremos presentes, para contabilizar personalmente a los marchantes, sentenciaban; ante la convocatoria campesina. O sea, continuaban con el menosprecio de una fuerza social tenaz y decidida para la lucha en estos largos años de existencia en el Sur.

El miércoles 15, fue una respuesta “contundente” y “unitario” al Gobierno de García que regala la propiedad de los peruanos. Más de 2 mil campesinos cooperativistas se movilizaban por las calles de la ciudad; y en donde se decidió determinar: desconocer la firma de la entrega en concesión del Aeropuerto Rodríguez Ballón y del Proyecto Majes II al Consorcio extranjero.

Si bien, los opinantes y los analistas de la derecha argumentaban, ante la empresa que resultó premiado con el regalo del Proyecto Majes II; “que donde estaban los chilenos, tras el Consorcio beneficiado. Estos son capitales españoles y colombianos”, aseveraban con elegancia. Esa explicación queda hoy en vacío. La realidad es que el dominio chileno se multiplica mientras este en gobierno la derecha colonialista, en varios sectores económicos. Así pues, la réplica política fue esta vez en el campo abierto como son las calles y los camisas verdes se alzaron con el triunfo momentáneo. Porque falta culminar con la conquista del poder el 3 de octubre en las urnas electorales.


Adueñarse del poder

Los campesinos antes de desplegar su fuerza en varios sitios o lugares; deben necesariamente concentrar las energías y el vigor social en uno que es rotundo: el esfuerzo por adueñarse del poder regional. Una vez haberse hecho con el poder político; la propiedad retornara a manos de la nación. Es decir, se recupera también el poder económico. Se obtendrá una soberanía pequeña al interior del territorio; pero será crucial; para que después se disperse a nivel nacional.

Ante la falta de economía para disputar sin apremios esta campaña electoral, se debe hacer funcionar al máximo la maquina social campesina. No se puede negar que la propaganda que extiende la derecha es descomunal; pero la imaginación, la movilización y sumado a las consignas guerreras en las plazas y calles es novedoso para la población. Ese numeroso contingente de hombres y mujeres humildes despliegan su capacidad de ser una comunidad de cooperativas, de crear una comunidad cooperativa; y finalmente de actuar como una comunidad cooperativa.