lunes, 3 de marzo de 2014

Preparar al Perú para las dificultades

Preparar al Perú para las dificultades

Cuando un desconocido viene armado y se apropia de nuestra casa de manera violenta e intenta luego sacarnos de ella. ¿Qué hacemos como el dueño de ese inmueble que nos ha costado casi toda una vida de esfuerzo?  Lo primero que se hará es decirle que abandone de inmediatamente ese domicilio ajeno a él. Si persiste, nos obliga a tomar una medida violenta para que abandone o tomamos el camino de la legalidad, que es presentar una denuncia a una corte de justicia. Lo más rápido y que no implica mucho costo económico es aplicar la expulsión por medios físicos al usurpador que venía apropiarse de la casa, sino de todo lo que contenía en ella.

Eso es lo que está hoy pasando con el Perú. Los que vienen con ese propósito de apropiarse del territorio (caso chileno) sea esta marítima o terrestre, buscan quedarse también con las riquezas que contienen en ellas. Como ese territorio tiene un dueño, debe de inmediato utilizar sus quejas ante la comunidad internacional o en el último término: utilizar su poderosa fuerza militar. Al mismo, tiempo es momento de preparar a la nación, para las grandes dificultades que se tenga que enfrentar en el curso de ese periodo de poner al país al ritmo de los grandes potencias del mundo.

Pero no se puede sacar al país del retraso con solo aplicar programas sociales o elevar el ritmo del crecimiento económico como lo hace hoy Ollanta Humala. Ese camino nos condena a seguir siendo un país dependiente de uno más fuerte que está en el norte o en el sur que observa nuestras riquezas para querer apoderarse. ¿Cómo preparar al Perú ante las dificultades que se avecinan? Debe hacer en tres puntos centrales como inicio de un Plan Nacional Bolognesi.

El primero, debe de estar enfocado a la agricultura. Hoy pocas familias de apellido extranjero como los Casagrande son los dueños de esas inmensas tierras de cultivo. Esta situación implica tomar una acción política con miras a democratizar las tierras. Donde pasen un sector a manos de medianas empresas que puedan ser dirigidas por los peruanos, y otro tanto al Estado. Promover las empresas mixtas desde arriba, para que puedan participar los peruanos. El segundo, se debe empezar la política de industrialización con los minerales que se exportan en bruto. Acercarse a los países que tienen una tecnología de punta, para que enseñen a nuestros técnicos jóvenes y después sacar una tecnología de acuerdo a nuestra realidad propia como país. Tercero, poner en punta nuestro equipo militar. Hacer una buena inversión en las Fuerzas Armadas sea esto en el logístico e ideológico.

Todo sea para hacer respetar el territorio y las riquezas que miran los países del exterior con vehemencia. Todas estas acciones ameritan grandes sacrificios de la nación y sus líderes. 

domingo, 23 de febrero de 2014

El cerco a un medio televisivo

El cerco a un medio televisivo

Está claro que no se puede más tener las relaciones económicas con Chile. Porque es un país que en forma permanente está que ataca con la guerra psicológica y económica al Perú. El presidente Piñera maneja una política exterior de naturaleza belicosa y expansionista. Esa es la causa que nos mueve a movilizarnos a los peruanos que radicamos en Venezuela y aplicar un golpe certero y que esta sale desde el seno mismo de la nación. Esa será también una respuesta política que daremos desde la cuna de la Revolución Bolivariana.

Sentimos mucho lo que está pasando hoy en Venezuela. Nos solidarizamos plenamente y al mismo tiempo, damos todo el respaldo al compañero Nicolás Maduro. Esperamos que cese la violenta, agitada por la derecha antinacional que desea entregarles el país a los Estados Unidos y generar un caos social desde las calles y los medios extranjeros. Estamos seguros que se impondrán el orden, la ley y la autoridad para que la Revolución prosiga su marcha a donde tiene que ir junto a sus líderes y su respectivo pueblo venezolano.

Pero los peruanos, no podemos desviarnos por el suceso del 12 de febrero en Caracas y debemos continuar DEFENDIENDO nuestra PATRIA. Para lo cual debemos utilizar toda nuestra fuerza en esta acción que hemos llamado, “El cerco a una televisora” el día 26 de febrero a las 9 am. Nos reuniremos  en Dos Caminos, para luego enrumbarnos a la televisora internacional. Este cerco al estilo inca a Telesur, tiene el propósito de dar a conocer nuestra posición política a nivel internacional y porque estamos decididos a DEFENDER con todo los medios necesarios y si es posible con la fuerza militar del Ejército. Toda sea por preservar  la soberanía territorial del Perú.

Consideramos, que es el momento de resolver problemas que no han sido cerrados del todo. Ahora que Chile desconoce el Tratado de 1929 e intenta anexarse el triángulo terrestre nos obliga a poner en agenda la revisión minuciosa de esos tratados que se han firmado desde 1883 hasta el presente: quienes los hicieron y en qué condiciones. Por eso el Movimiento Peruanos en Venezuela plantea que se forme un  “Comité de Expertos” para que den un informe al país de cómo se llevaron esos acuerdos contrarios a la soberanía peruana y todo vuelva entonces a foja cero y el Perú entonces inicie a reclamar el retorno de Tarapacá al suelo peruano.

Cuando estemos con la bicolor en la mano la consigna es que “el territorio no heredamos para regalar, recibimos para DEFENDERLA” y eso es lo que estamos haciendo con la generación que viene a poblar a este territorio, que tanto esfuerzo le costó agrandarlos a los poderosos incas.

lunes, 17 de febrero de 2014

Romper las relaciones bilaterales con Chile

Romper las relaciones bilaterales con Chile

En la reunión 2+2 la posición de Chile es: que se reconozca la pérdida del mar de Tacna, otorgarle los 40 mil km2 de tierra de Tacna y renunciar a las 200 millas. Para que se logre ese objetivo chileno, el Perú debe modificar sus leyes nacionales, para que el fallo de la Haya se aplique. La nación y los nacionalistas lo RECHAZAMOS  y Ollanta Humala está obligado hacerlo y de inmediato se debe exigir el retiro de las empresas chilenos del Perú, aunque este protegido legalmente por esa firma TLC que hizo Alán García. No nos importa porque se trata de una cuestión de razón de Estado.

Chile tiene hoy empresas constituidas en los sectores claves del Estado. Si uno viaja al Perú, desde Tacna hasta Tumbes uno halla a los inversionistas chilenos como los propietarios de tierra, inmobiliarios, centros comerciales, transportes ferroviarios, cadena de farmacias, medios de prensa, yacimientos mineros, etc., que suman unos 15 mil millones de dólares contra los 7 mil millones dólares del Perú. ¿Quiénes permitieron toda esta invasión económica? Los partidos tradicionales, corruptos y entreguistas como los Fujimori, Toledo, y García. Ellos entregaron nuestras riquezas a los extranjeros y a los peruanos han convertido en unos simples empleados de sus negocios o siervos en los campos agroindustriales.

Se han apropiado de nuestro mercado nacional. Si vamos a Chile, los peruanos están como obreros, comerciantes informales, empleadas domesticas y para disimular que tenemos inversiones en Chile, permiten a unos cuantos peruanos administrar 264 negocios de comida. Chile no permite que un extranjero sea el propietario o inversionista en mercados estratégicos, porque sus leyes lo prohíben. Por ejemplo, un peruano no puede comprar una parcela de tierra de 5  o más de hectáreas, tampoco dejan alquilarla. Solo es posible (el peruano o el boliviano) trabajar como un simple jornalero en el campo. Esas tierras están reservadas para los chilenos que hayan nacido allá.

En consecuencia, no se dan de manera equitativa las relaciones económicas entre Perú y Chile. Mientras los chilenos están en el Perú como grandes empresarios; los peruanos están en Chile como simples empleadas domesticas o como pequeños comerciantes en las calles. No nos conviene. No es un país de confianza para realizar negocios económicos o intercambio comercial reciproco. Peor aún, porque está permanentemente mirando nuestras riquezas en el Sur. Debemos romper de una vez, cualquier relación bilateral que tenemos con Chile y retirar de inmediato a nuestro embajador de Santiago. 

domingo, 9 de febrero de 2014

Renunciar al Pacto de Bogotá

Renunciar al Pacto de Bogotá

Ese fallo de la Haya se esfuerza en romper el suelo marítimo, porque ese dictamen jurídico del 27E atenta directamente a nuestra  soberanía territorial. Si se trata de ganar (como lo afirma Ollanta Humala), vayamos un poco más al Sur  y anexémonos  la Región de Copiapó al Perú. Esto nos permitirá de paso recuperar el departamento Tarapacá que se halla secuestrado desde 1883 en manos chilenas. Eso implica ganar en los hechos señor Ollanta.

Chile ambiciona mucho nuestras riquezas. Ahora, vienen con todo como lo señala Piñera  a querer apropiarse de nuestro territorio. Es la zona del triangulo terrestre que suman cerca a 40 mil km2; ese suelo de la costa es fértil para la agricultura. Por eso planteamos DESCONOCER ese fallo de la Haya. Esta postura de Chile nos empuja a sacar tempranamente un plan: como es darnos el  derecho a “cuestionar” los tratados ilegítimos firmados después de de 1879 para aquí entre Perú y Chile. Y nosotros haremos eso.

Frente a ese dictamen prochileno que hizo la Haya, los partidos políticos (Apristas; Fujimoristas; Toledistas y otros) decidieron aceptar cobardemente, porque según ellos son “democráticos” y “respetuosos” con la comunidad internacional. No calcularon que la nación iba a salir en DEFENSA de su territorio y pasaron ellos a ser los TRAIDORES  a la PATRIA. Hoy es la nación y sus organizaciones nacionalistas que DESCONOCEN ese fallo; y piden que el Gobierno de Ollanta retire de inmediato al Estado de ese convenio firmado en Bogotá.

Como la nación está disconforme y NO admite que se mutile la soberanía del Perú, decide apartarse del Pacto de Bogotá. Este organismo tiene el propósito, que los países resuelvan de manera pacífica sus problemas limítrofes en una corte internacional. Pero si este corte como la Haya ha violado la soberanía del Estado y el derecho de los 30 millones de habitantes. Indudablemente se tiene que RECHAZAR y mandar al carajo ese fallo rastrero. En consecuencia. El gobierno debe renunciar al Pacto de Bogotá. Y si no lo hace, es el pueblo que lo pide. Que sea lo más pronto posible para que se aborte ese fallo prochileno.

lunes, 3 de febrero de 2014

NO, reconocemos ese fallo de la Haya

NO, reconocemos ese fallo de la Haya

Ante una situación crítica que vivió el Perú entero el 27 de enero, debimos sobre todo buscar “la unidad” del país en su totalidad contra un país agresivo como lo es Chile. Eso es lo que hicimos. Pero este conflicto a nivel diplomático continua, porque la política exterior de Chile básicamente consiste en apropiarse de nuestro territorio y sus riquezas.

Ahora bien, si nuestro país en un momento confió en un árbitro internacional como la Corte Internacional de la Haya para recuperar el espacio marítimo que los chilenos habían aprovechado para empezar a explotar la pesca artesanal en las lanchas y a gran escala en esos barcos modernos. Por qué sucedió toda esta usurpación rápida y sin que ellos consiguieran alguna oposición de las fuerzas militares en el mar de Grau?  Nuestro Ejército no estaba vigilando las fronteras de forma permanente. Todo esto pasa, debido a que los gobiernos neoliberales no tienen la política de custodiar nuestros límites como lo haría un Estado Nacional fuerte y un gobierno Nacionalista.

Los líderes nacionalistas, sean estos civiles o militares buscan de inmediato dominar con su autoridad todo el territorio patrio. Para ello requieren, tener una Fuerza Armada de primer nivel, y con oficiales que aman sobre toda las cosas a la PATRIA. Con equipos modernos, de las mejores de Latinoamérica y si es posible del mundo.

Retornando a lo de Haya. El Perú puso la demanda el año 2008 ante la Corte Internacional de la Haya. El argumento nuestro, el limite marítimo empieza en el punto de la concordia (la frontera terrestre de ambos países llega al mar, como señala el Tratado de 1929) que luego toma un trazo equidistante. Mientras, la posición de Chile, era que el inicio se da en el Hito nro. 1 y sigue una línea paralela; sosteniendo esa posición en los acuerdos pesqueros del año 1952 y 1954.

Al final, la Haya ha dado un veredicto el 27 de enero: Chile sale ganando con su posición legal. Se queda con las 80 millas, donde se encuentra un potencial de los recursos pesqueros de anchoveta y jurel. No es poco lo que sale de ese trecho marítimo. Suman 500 mil toneladas de pescado al año. Y lo peor de este veredicto, es que intentan dejarnos a Tacna sin mar. Al Perú le dan, a partir de las 80 millas para mar adentro. Un mar profundo y no apto para los peces más cotizados que tienen una demanda en el mercado europeo. Este espacio no goza de soberanía del Estado peruano, porque a ese lugar se le conoce como la alta mar. Cualquier país del mundo lo puede explotar.Incluso Chile.

Cual fue la reacción del Gobierno de Ollanta ante esta nueva amputación territorial de una institución internacional prochilena? Respetar ese fallo. El país ha salido ganando por que le asignaron más del 70 por ciento del territorio que estaba en disputa. No compartimos esa postura tímida y ajena al sentir de la nación. La realidad nos dice: que no ganaron esa demanda legal y tampoco invadimos  el territorio chileno. Ninguno de los dos. Sé que es fuerte lo que tengo que decir, pero lo hago por el bien de la nación y para que las futuras generaciones sepan de nuestra posición política. i) Ese organismo totalmente parcializado, toma la propuesta de Chile como el más fuerte y en consecuencia ha mutilado nuestra frontera marítima de las 200 millas; y  ii) no ganamos absolutamente nada. Porque ese trecho marítimo era nuestro, porque así estaba estipulado en el tratado 1929. Como sabrá el país y las fuerzas nacionalistas. Ganar implica anexar un territorio del otro. En este caso sería, quedarnos con una parte de ellos como es la región Copiapó. Ese es el lindero que nosotros siempre tomamos como valido: Tarapacá-Copiapó.

Cuanto presentamos la carta a la Embajada el pasado 22 de enero, pusimos una advertencia de lo que pudiera hacer este organismo internacional de la Haya. Dimos una posición correcta al Embajador Chávarri. Ante los medios de comunicación y a la comunidad internacional lo REPETIMOS con más convicción de que iremos hasta las ultimas concecuencias. Si había un fallo desfavorable para el Perú, no acatábamos. Porque en los hechos implicaba mutilar (nosotros mismos) nuestro territorio y entregarlos ingenuamente  a Chile, Por eso, decidimos RECHAZAR ese dictamen que despedaza la unidad de nuestra soberanía del Perú. Y pedimos de que Ollanta DEFIENDA con todo las fuerzas que tiene como Jefe de Estado que es a nuestro país. Sea pues, un soldado que ama profundamente a la patria.

Ya los representantes de los partidos tradicionales y corruptos dieron su respaldo al enemigo chileno, que cada uno de nuestros compatriotas visualizan físicamente quienes lo son hoy y siempre. Retractase señor Humala y tome la bandera que dejo en 1880  en el mar de Grau nuestro soldado Ugarte y queme el último cartucho como lo ha hecho nuestro héroe supremo Bolognesi. La nación y sus organizaciones patriotas ya tomaron la ruta correcta que es DEFENDER la patria hasta las últimas consecuencias. O defiende nuestra soberanía o se pasa al bando del enemigo chileno como lo hizo el militar Miguel Iglesias en 1882. Usted mismo señor presidente escribe su historia en el siglo XXI y se condena también ante la nación y las nuevas generaciones que estamos luchando por preservar la integridad territorial de nuestra amada tierra. 

lunes, 20 de enero de 2014

El Perú, lejos del ALBA

El Perú, lejos del ALBA

Nuestro país a inicios del año 2000  empezó a dar muestras de cambio a nivel político en las calles, universidades y organizaciones sociales nuevas. No era una demanda común y que esta tenga una característica foránea como ocurrió en los años 80. Era totalmente distinto, porque el sentir de la nación rondaba en base al nacionalismo, como una propuesta política-económica original y relacionada a las raíces propias de un pueblo inca que había vivido ese suelo sagrado que hoy lo habitamos.

Por esas fechas se apareció aquel militar de nombre Ollanta. Raro para los pitucos con plata y para ese grupo pensante de Lima. Él de inmediato ayudó a promover el nacionalismo pragmático y desecha de plano la ideología. El pueblo se manifestaba en las plazas, que el nacionalismo pasaba necesariamente por recuperar las riquezas que habían caído en manos extranjeras.  Al mismo tiempo, Ollanta empieza a hablar de una política internacional más democrática y justa con los vecinos de Latinoamérica.

¿Cuál era esa nueva relación económico a nivel continental de Sudamérica para enfrentarse a los aliados de Estados Unidos que proponían el ALCA? Era pues el ALBA, que salía como una alternativa de los países de Venezuela y Cuba. Más allá de que los neoliberales de derecha lo critiquen que era impulsada por la izquierda internacional. No quedaba más opción a los nacionalistas, que unirnos para proteger a la nación de la pobreza económica y de la exclusión política que había causado el neoliberalismo brutal importado por los gobiernos anteriores.

Así pues, el ALBA es una integración económica de los países de Latinoamérica y el Caribe  que busca la colaboración y la complementación entre los que desean formar parte de esa organización regional que se funda un 14 de diciembre del 2004 en La Habana. Básicamente, el ALCA se empeñaba en una unión donde se priorice la liberación del comercio y las inversiones, y el ALBA buscaba poner esfuerzo en luchar contra la pobreza y la exclusión social y argumentaba de que hubiera mecanismos que se pueda aprovechar la cooperación entre los miembros asociados, para saldar las diferencias entre los países. En concreto, el ALBA enfatiza la idea de un comercio e inversión sin que esto sea un fin en sí mismo, por el contrario, sea un instrumento para alcanzar un desarrollo justo y sustentable.

Es de saber, que algunos de sus principios del ALBA, es reticente a las “reformas” que buscan la desregulación y la privatización de los servicios públicos. Porque tiene el propósito de fortalecer el Estado y promover la participación ciudadana en los asuntos públicos. Contrario a la que postulaba el ALCA, que es la doctrina del libre comercio, que traería automáticamente el crecimiento y el bienestar. El ALBA establece  la importancia de que el Estado intervenga para la reducción de las disparidades entre países.

Venezuela propone la alternativa Bolivariana para las Américas y uno de esos aspectos del ALBA es la integración energética de América Latina y el Caribe. Esto tiene relación, con el interés de diversificar los mercados para el petróleo venezolano y con el suministro estable de petróleo a precios justos en beneficio de las sociedades de los países que lo conforman; pero a la vez se busca, un proceso de transformación que limite el rol de las empresas multinacionales petroleras en Latinoamérica.

¿Cómo se beneficiaba el Perú con pertenecer a dicho organismo internacional? Venezuela a los países de las Comunidad Andina les ofreció una cooperación en el marco de la iniciativa Petroandina. En julio del 2005 en Lima logran aprobar el Acta Presidencial de Lima en la que los socios de la CAN expresan su interés por una integración energética más profunda. Ecuador fue el primer país en aceptar dicha oferta y luego le siguió Bolivia. El Perú quedó anclado a los intereses de Estados Unidos. Cuando llega a la presidencia Ollanta Humala el 2011, sigue esta misma política dejado por sus antecesores.

Dentro del proyecto de complementación entre Perú y Venezuela. Por ejemplo, Perú producía alimentos agrícolas que hoy Venezuela los necesita y Venezuela tiene combustible que para el Perú es indispensable. Complementación en base a las potencialidades. Otro de los puntos económicos del ALBA, es el plan de crear el Banco del Sur, el cual da créditos para proyectos de infraestructura binacionales o multinacionales, sin las altas imposiciones del Banco Mundial, y el Fondo Monetario Internacional o ese impagable deuda externa que se tiene con los organismos internacionales. En el Plan Gran Nacional para buscar el desarrollo de la alfabetización. Todo eso ha desperdiciado el hoy presidente Ollanta Humala, porque quiso que el Perú estuviera lejos del ALBA, pero más cerca a los intereses económicos de Estados Unidos.

lunes, 30 de diciembre de 2013

La estrategia para recuperar el territorio preso

La estrategia para recuperar el territorio preso

Han pasado 134 cuando el país de Chile le declara la guerra al Perú. En aquel entonces estuvo como presidente Manuel Prado del partido civilista. Se sabía, con años de antelación que el ideólogo chileno Diego Portales azuzaba a su pueblo para que se adueñe de una parte importante del territorio peruano: “Tarapacá y Arica era una zona llena de riqueza mineral y pesquera que debía ser anexada rápidamente mediante una acción militar”. Y desde luego, Portales promovía una diplomacia “adversa” para quebrar la unidad política, la defensa militar de Perú y Bolivia, en caso de una agresión militar chilena.

¿Qué significaba en los hechos esa confederación de estos dos países que tienen un origen común e histórico? Pasaba a convertirse en un país más extenso en territorio y numeroso en su población. Esa acción política como fue en aquel entonces la Confederación Perú-Bolivia, sustentada por Santa Cruz- significaba la debilidad del Estado chileno -posiblemente su desaparición- y el atraso económico de Chile como república en el próximo siglo. Por ello, los chilenos se vieron en la necesidad de declararnos la guerra un 5 de abril de 1879 para hacerse con la riqueza que existía en ese departamento y luego arrebatarnos un territorio extenso como es Tarapacá que nos ha dejado nuestros antepasados los incas. 

En pleno siglo XXI han surgido voces desde el llano de la nación, de que ese tratado firmado por un militar ilegitimo como Miguel Iglesias en 1881, no tenga la validez absoluta en cuanto viola la integridad territorial  y rompe la unidad política del Estado. Por consiguiente, dentro de la  teoría de las relaciones internacionales, se acude a revisar las acciones históricas, económicas y políticas a lo largo de esos años. Se hará con más cuidado con el gobierno de Humala Tasso que considera un aliado económico del Pacifico. En consecuencia, podemos deducir que el ejército chileno invadió el suelo patrio con la complicidad de los políticos peruanos (el civilista Pardo) y de un grupo de altos mandos militares que buscaban entregarles todo el territorio y su riqueza. Pero es la nación congregada de civiles, militares y organizaciones populares armados que salen al frente en 1879, para defender el territorio en su integridad.

¿En la actualidad cual es la estrategia para recuperar ese territorio preso que se halla en manos del Estado chileno? Para responder esta premisa (tomo la teoría nacionalista), se debe desconocer todo tratado firmado con el país de Chile. Porque se dieron por hombres que no tenían la legitimidad de la nación y no contaban con el respaldo del los líderes del ejército patriota como Avelino Cáceres por el Centro y por el Sur de García Calderón. Habían subestimado por completo la moral y la confianza que de la nación los había entregado para que representen al Estado peruano. En pocas palabras, acudimos a la reflexión de que ningún tratado es perfecto y por tanto uno lo cuestiona la naturaleza misma de esos documentos firmados por los antinacionales de la patria. Con este accionar, es que se dan en los hechos la teoría realista, que lo más idóneo es nombrar como la nacionalista

Ahora, vayamos a precisar la estrategia que debe tomar un gobierno que sea en esencia nacionalista y se fije implementar un Estado nacional que sea fuerte ante el resto de los países a nivel diplomático y militar. En resumidas cuentas, lo que debe hacerse a corto plazo es, unir todas las fuerzas políticas populares para preparar a la nación para un periodo de tensión psicológica agudo y más adelante, botar a los capitales chilenos que se han hecho con el mercado nacional.

A mediano plazo, debemos adiestrar a nuestro ejército al máximo para que gane una batalla decisiva y se haga con ese territorio robada para devolverle a este suelo patrio peruano. Requerimos una oficialidad con alto grado de compromiso y que demuestre esa convicción de querer expandir el poderío del Estado, y al mismo tiempo poner a las Fuerzas Armadas a la altura de esos países europeos fuertes y temidos como son los alemanes o los rusos. Si por ahí, pudiera haber tropiezos y Chile no acepta devolver el territorio nuestro en ninguno de los escenarios planteados. En esas circunstancias  estamos obligados a derrotar militarmente y aplastarlos a su clase política y pulverizar sin piedad alguna toda esa infraestructura económica chilena que se halla en los sectores fundamentales de la sociedad peruana.

Como epilogo, para sustentar esas acciones sea esta política o militar que venga desde los poderes del gobierno, he acudido a la teoría realista (la nacionalista) donde se entiende que el Estado es unitario y poderoso; la nación debe ser soberana y un actor fundamental en los asuntos internacionales; el poder económico se unifica en manos de la nación y del Estado y la riqueza se distribuye a los nacidos de ese territorio que guarda una historia lleno de proezas en esas guerras a sangre y fuego, para mantener la riqueza y su respectivo dominio territorial.