En 1990
Alberto Fujimori implemento el modelo neoliberal, sin oposición alguna de la
izquierda peruana. Es más los zurdos solo veían de cómo la imagen de ellos se
había mellado producto de que eran partidario de tomar las armas. Continua el
mismo rumbo en el 2002, Alejandro Toledo. El APRA acaudillado por un corrupto y
mercader de la riqueza, como Alan García, ha puesto en el 2006 al país en
condición de colonia no solo de los chilenos; sino de los norteamericanos.
Un Fujimori
sin carisma alguna, sin experiencia de gobierno utilizo a las Fuerzas Armadas
de aliado, para mantenerse en el poder por más de una década. Un movimiento
estudiantil adormitado. Los partidos políticos dispersados. En ese contexto el
japonés tenía el espacio libre para rematar las empresas de la nación, sin
ambages a los empresarios bandidos, que aumentaron una vez adquiridas sus
fortunas personales.
En estos
cuatro años del Gobierno de Alan García, el movimiento campesino apareció con
una deslumbrante fuerza social. Una vez que el movimiento de los reservistas
perdiera la organicidad, producto de que sus líderes estén encarcelados, ante
el intento fallido del levantamiento en Andahuaylas en el 2005. Era imposible
ver una oposición en las calles. La izquierda en los 20 años del modelo
neoliberal, desplego sus paros inútiles no para poner en riesgo al Gobierno,
sino buscar un arreglo económico para ellos como dirigentes. Sus paros solo
ocurren en las calles de Lima. Sus lugartenientes se han vuelto experto en
negociar las luchas de organizaciones sociales en las provincias. Eso es todo
lo que se puede esperar de los comunistas. Es decir, aprendieron esas argucias
de los que ostentan ese cargo vitalicio en la CGTP, como un Mario Huamán.
Una oposición real
El
movimiento campesino ataco por dos puntos importantes al Gobierno. a) Por el
lado del Sur. El campesinado que esta aglutinado en el cooperativismo y tiene
su centro de dirección en Arequipa; b) El otro ha sido desde Oriente de la
selva. Los campesinos de diferentes etnias. Para frenar el avance a sus tierras
de las inversiones petroleras y del gas. El primero partidario de abrirse el
liderazgo, sin las organizaciones populares. Pero con formación castrense.
Recordemos que realizaron "la gran marcha" a Lima el pasado año del
2009. Sin que la prensa tenga que rebotar en las primeras planas. Sino ocurrió
esa posibilidad, catapultaban su liderazgo a nivel nacional. Tendríamos hoy a
los nuevos líderes en la escena nacional. Claro está, desplazando a segundo plano
a un Ollanta sin una perspectiva política. El segundo sí que puso en aprietos
al régimen del APRA. Pero hubo un mal cálculo de Pizango en la táctica de
combatir y dejar sus bases y marcharse a la capital. Fue el final de su
alzamiento civil. Con ese hecho sepulto sus aspiraciones políticas. Otra vez el
único líder ante el país era el comandante Ollanta.
El
neoliberalismo instalado por estos tres gobiernos, pusieron a los peruanos en
la situación de siervos de empresarios del exterior. Como se da en la praxis.
El capital chileno avanza a pasa agigantado. No le basta tener en sus manos el
sector de las empresas estratégicas. Ahora están tras las tierras de Majes
Siguas II. Es ahí donde da batalla a bayoneta en mano el cooperativismo, con el
lema en sus labios, “tierra o muerte”.
No es que
el Ollantismo tenga el rol de la oposición. Ollanta el jefe, ha sido un militar
cobarde. Lo delato el propio hermano Antauro Humala, en el año 2001. Eso si es
que es respetuoso con los que delinquen. Para recordarles los hechos políticos,
que pudieron terminar los 20 años del neoliberalismo, menciono solo dos. a)
Cuando los arequipeños pidieron, junto a las fuerzas nacionalistas, a que
desconociera el resultado electoral del 2006.Denunciara el fraude realizado por
los apristas, y enrumbara inmediatamente a la ciudad Blanca. Arequipeños, junto
a sus líderes iban ponerle la banda presidencia, para que asumiera la dirección
del país. Nunca se asomó a la ciudad del Misti. Mato las esperanzas de los
jóvenes que habían combatido a la derecha desde las aulas universitarias, como
los otros sectores que buscaban el cambio radical. b) En el 2007, un grupo de
velasquistas llamo al Golpe de Estado, para defenestrar a un García
entreguista. Desperdicio asumir el rol que le era encomendado de fuerzas
nacionalistas del Sur. El comandante perdió la oportunidad de escribir su
nombre en la historia como un militar revolucionario…
Disputarle el poder
En esta
etapa el movimiento campesino debe calibrar sus fuerzas, no para marchar en las
calles, para que un AG, se apiade y cambie su política colonialista. Pensar
así, es caer en el infantilismo como dirigente. Si la izquierda entra en sus
movilizaciones, que sigan en su camino. Al campesinado debe unirles la
vitalidad para disputarle el poder a la derecha.
El
comandante no garantiza el cambio real que espera la nación. Su objetivo es
aprovechar esta elección cercana, para aumentar su cuenta bancaria y concurrir
a los centros chilenos, para comprarle a la mujer que funge de lideresa, joyas
y vestimentas de marca. Está pensando en recuperar su clase de abolengo. Por
eso es que lanza, que solo es posible una transformación, y no una revolución.
Es que él representa a una derecha refinada, que está junto las fuerzas
sociales de la nación. Se tiene que combatir, abiertamente esta alta traición
del soldado desertor de Locumba.
El
movimiento campesino de estos dos frentes, tiene que luchar para hacerse fuerte
y lanzarse, para capturar el poder como de lugar. El Sur y el Oriente están
obligados a ganar las elecciones regionales. Solo así se puede pensar en una
posible REVOLUCION NACIONALISTA. Es desde estos flancos que se tiene que
rearticular un movimiento consistente e inteligente, para mover las fuerzas a
nivel nacional. Lo que hemos visto años atrás es solo golpes locales, que
fácilmente ha sido toreado por los ministros de García, y también con la ayuda
de los zurdos, que tienen el papel de compinches del mandón del palacio de
Pizarro.